Jñana Mudra

El Jñana es uno de los mudras más conocidos universalmente.

Ancestralmente utilizado en la religión budista, llega a nuestros días como uno de los mudras más favorecedores para la meditación, aunque también tiene múltiples beneficios para otros ámbitos de la vida.

1. A nivel físico: alivia los desórdenes del sistema nervioso.
2. A nivel mental: nos aporta una mayor facilidad de concentración y atención; activa la memoria.

3. A nivel emocional: despierta una sensación de ternura y afectividad.
4. A nivel espiritual: nos pone en contacto directo con la sabiduría y conocimiento de la divinidad.

Practica del mudra Jñana

Se puede realizar de maneras muy diferentes: en la ubicación del loto, sentado con las piernas cruzadas y con los brazos apoyados en las piernas y el mudra en ambas manos.

También es posible ejecutarlo a la altura del corazón con la mano derecha y compaginado con el Chin Mudra, éste realizado con la mano izquierda y apoyado entre las piernas, en la zona del primer chakra.

Como siempre, recomendamos acompañarlo de algún tipo de meditación sobre el conocimiento de uno mismo.

Este es el camino más difícil; requiere una fuerza de voluntad y un intelecto tremendos.

Tomando como base la filosofía Vedanta, el Jnana yogui utiliza su mente para indagar sobre su propia naturaleza. El espacio que está dentro de un vaso y el que está fuera de él los percibimos como si fueran diferentes. De la misma manera pensamos que estamos separados de Dios.

El Jnana Yoga le permite al devoto romper el vaso y así llegar a sentir directamente su unidad con Dios.

Los velos de la ignorancia desaparecen. Antes de comenzar a practicar Jnana Yoga, el aspirante debe haber integrado lo aprendido en los otros caminos del yoga, ya que sin abnegación y amor a Dios, sin un cuerpo y una mente fuertes, la búsqueda de la realización del Ser puede transformarse en mera especulación vana.