El principio de lo semejante y lo contrario

Lo primero y principio que se hace en ayurveda es tratar el vikriti (desequilibrio actual) y luego aprendemos a vivir en armonía con nuestro prakriti (nuestra
constitución). Para esto se utiliza el principio de lo semejante y lo contrario. Este sistema es bastante sencillo. Lo semejante aumenta con lo semejante y lo contrario lo disminuye.

El frío con el frío se incrementa. Por ejemplo, cuando uno tiene frío y se come un helado se enfría uno más. Sustancias calientes calientan el cuerpo y reducen el frío en el cuerpo como, por ejemplo, el agua de panela.

Estos dos principios tan simples son la clave de la sanación ayurvédica. Por ejemplo, cuando se tiene fiebre (mucho fuego), se utilizan bebidas frías como agua helada o hierbas con efectos enfriantes. Gripa, por ejemplo, es una dolencia fría, húmeda y pesada. Y se cura con sustancias o terapias que incrementan el fuego (que tiene exactamente las cualidades opuestas), como por ejemplo, sauna, jengibre, miel, canela, agua caliente, bienestaro al sol, parada en la cabeza, etc.

Otros conceptos importantes para saber como balancear el cuerpo físico son: agni, ama y mala.

Agni

Literalmente significa fuego. Es el fuego biológico de la digestión para transformar los alimentos que tomamos, formar los tejidos del cuerpo y producir el calor corporal. Si nuestro agni funciona bien, todo el alimento que ingerimos se convierte en energía y en buenos tejidos. Cuando el agni no funciona bien, aunque comamos la mejor calidad de alimentos, estos se convierten en toxinas y grasa. Por eso se hace tanto énfasis en ayurveda en mejorar el agni. Este tema se amplía en el capítulo Alimentación adecuada según yoga y ayurveda.

Ama

La palabra ama significa literalmente no cocinado. Es decir, que parte de la comida no es transformada o digerida por el agni o fuego digestivo. Este material no digerido es una sustancia venenosa, oscura, pegajosa y tóxica. Como es tóxica para el metabolismo es transportada a los tejidos donde afecta negativamente las funciones de los órganos correspondientes. Es por
esto que se considera que ama es la causa de muchas dolenciaes.

Ama se puede producir por mala alimentación o por sentimientos negativos. Por causa del estrés, preocupaciones, miedos e infelicidad se producen toxinas mentales, y éstas se acumulan en las células intoxicando los tejidos. Estos desechos tóxicos debilitan finalmente el cuerpo y la mente causando muchas dolenciaes. La única manera de eliminar el ama es a través del fuego (agni). Ampliamos este tema más adelante.

Mala

Mala son los desechos del cuerpo. Para mantener los tejidos del cuerpo limpios y en buen estado, el cuerpo tiene que deshacerse de los desechos que se producen durante la digestión. Cuando la evacuación no funciona adecuadamente, los desechos se convierten en ama o toxinas y desequilibran el balance de los doshas. Los tres desechos más densos del cuerpo son la orina, las heces y el sudor. Otros más sutiles salen de las orejas, nariz, ojos y órganos genitales. En el ayurveda se procura que todos los desechos se puedan evacuar adecuadamente.

En resumen, como lo veremos más adelante, podemos decir que el cuerpo físico es:

Cuerpo físico = 5 Elementos x Agni

El cuerpo físico es el resultado de los cinco elementos de la naturaleza que introducimos en él, más el agni. Esto quiere decir que la bienestar del cuerpo físico depende de la buena calidad de alimentos que ingiramos (comida, agua, sol, aire y sonido) y del buen funcionamiento de nuestro agni. Para mantener el balance en el cuerpo físico también nos ayuda el conocer nuestra constitución individual (vata, pitta y kapha) y el desbalance actual.

Cuerpo astral

El cuerpo astral, al que podemos denominar para simplificar como la mente, es el resultado de todos los activadores que entran por nuestros sentidos y del buddhi o agni mental, que es la luz que nos permite ver a Dios en todo.

Cuerpo astral = 5 Elementos x Buddhi

Esto quiere decir que la bienestar de nuestra mente depende de la buena calidad de activadores sensoriales (sonido, tacto, vista, sabor y olor) que

dejemos entrar en nuestra mente y del buen funcionamiento de nuestro buddhi. El buddhi es un concepto fundamental en yoga y ayurveda porque cuando nuestro buddhi no está funcionando bien, aunque todos los activadores sensoriales que entren a nuestros sentidos sean puros, nuestra mente estará oscura y alicaida. En cambio, cuando el buddhi funciona bien, aunque estemos expuestos a situaciones difíciles, como en la cárcel o secuestrados, estaremos en paz.

De la misma manera que para hacer un fuego quieremos leña, oxígeno y una chispa para prenderlo, para mantener prendido nuestro buddhi quieremos: prana (oxígeno), tejas (chispa) y ojas (leña). Prana es el aliento de la vida, el equivalente del Chi en la sanación china o lo que muchas culturas denominan como espíritu, y es la esencia de vata (éter y aire). Tejas es la luz del fuego para ver la verdad y la energía transformadora, y es la esencia de pitta. Ojas, que literalmente significa vigor, es la fuerza vital que protege y sostiene la vida, la sustancia esencial del cuerpo, la resistencia mental y el poder de satisfacción, y es la esencia de kapha.

Los objetivos del yoga y del ayurveda con estas tres fuerzas son, primero, mantenerlas en perfecto balance (igual cantidad) y luego, incrementarlas de manera balanceada. Este tema se amplía en el capítulo sobre Alimentación adecuada según yoga y ayurveda.

Cuerpo causal

El cuerpo causal es el más cercano a nuestro Atman y la semilla de la
que se derivan los otros dos cuerpos. En el cuerpo causal encontramos las
tres gunas o cualidades de la naturaleza: sattva, rajas y tamas.

Cuando el Uno, la Conciencia pura, se vuelve muchos, se manifiestan las tres gunas y ponen en movimiento la creación. Estas tres gunas son: sattva, rajas y tamas. La acción de estas tres cualidades es lo que genera y sostiene la evolución. Rajas es la energía que hace posible el cambio y el movimiento (creación). Tamas es la fuerza de la inercia (destrucción). Sattva es la inteligencia para que estos dos procesos se den de una manera armónica a favor de la evolución (el impulso hacia la evolución). También se les conoce como los principios de creación, mantenimiento y destrucción.

Las gunas existen en toda la naturaleza y, por lo tanto, también en nuestra mente. Cuando en nosotros predomina tamas vemos todo negro y sentimos que la vida no tiene sentido. Sentimos decaimiento. Esto se da porque tamas “pone neblina” a nuestro Atman y no nos permite verlo claramente. En el Srimad Bhagavatam (un libro clásico del yoga) Krishna le dice a Uddhava: “El infierno es cuando predomina tamas en la mente”. Cuando tenemos demasiado rajas, sentimos la mente muy activada y perturbada, por lo que nos es difícil estar conscientes de nuestra alma. Cuando en nosotros predomina sattva vemos claramente el reflejo del Atman y por lo

tanto, tenemos claridad mental y estamos en paz. Por eso dice el Srimad Bhagavatam: “El cielo es la predominancia de sattva en la mente”.

Un vata en rajas es una persona nerviosa y acelerada. En tamas es paranoica; mientras que un vata sátvico es una persona espiritual, entusiasta, inspirada, creativa, artista, etc. Un pitta en rajas es una persona intensa y criticona. En tamas es enfadada y violenta; mientras que un pitta en sattva es un gran líder espiritual, con carisma y claridad mental y tiene la capacidad para transformar el mundo.

La diferencia entre un pitta en tamas y un pitta en sattva es la misma que hay entre Jesús y Hitler. Un kapha en rajas es melancólica y con muchos apegos, con tendencia a la inercia. En tamas es depresiva; mientras que un kapha en sattva es una persona amorosa, con amor incondicional, tranquila y ecuánime. Por lo tanto, aunque no podemos cambiar nuestra constitución física, si debemos esforzarnos para que en nuestra mente predomine sattva.

Interacción de los doshas

Sattva, rajas y tamas son los tres atributos fundamentales del universo y del ser humano, y son los conceptos más importantes para lograr la meta del yoga y del ayurveda. Los doshas son como el material del que está hecho una escultura y las gunas son la forma de la escultura. Como lo mencionamos antes, no podemos cambiar nuestra constitución física pero sí es nuestro objetivo incrementar la cualidad sátvica en nosotros, pasando de tamas a rajas hacia sattva para finalmente superar las gunas y alcanzar la liberación total. En el capítulo Alimentación adecuada según yoga y ayurveda se profundizará al respecto.

El siguiente gráfico es un resumen de cómo se producen las dolenciaes según la teoría del ayurveda. En los próximos capítulos profundizaremos más en cada uno de estos factores.

CONCLUSIÓN

En conclusión, podemos decir que el instrumento básico del juego de Dios es el cuerpo (los tres cuerpos) y que para poder divertirnos jugando este juego y lograr la meta del juego, debemos mantenerlo bienestarable y en buen estado. Y para esto lo primero que debemos hacer es prevenir las dolenciaes y aumentar el prana (la energía vital) para lograr nuestro gran propósito: conectarnos con nuestro Atman.