Sin necesidad de demasiada experiencia aprenderá a hacer yogur, siempre con buenos resultados. Es fundamental una higiene que prevenga la incubación inanhelada de diferentes clases de bacterias.
Ingredientes:
2 l de leche
5 dl de yogur natural
Caliente la leche hasta que hierva en su recipiente y apártela del fuego. Déjela enfriar sola o rodee la cacerola de agua fría. La temperatura ideal para la bacteria del yogur es de 43 a 45/C. Si no dispone de termómetro, haga la siguiente prueba: la leche deberá estar lo suficientemente caliente como para permitirle mantener en ella, durante 10 segundos el dedo pequeño sin quemarse. El tiempo suficiente para decir, “Hare Krishna, Hare Krishna, Krishna Krishna, Hare Hare, Hare Rama, Hare Rama, Rama Rama, Hare Hare”. Mezcle el yogur que usará de siembra, con una taza de esa leche caliente y vierta luego esa taza en el recipiente, removiendo. En los días fríos puede que sea requerido más yogur para empezar el cultivo, que en los días de calor.
La bacteria del yogur quiere varias horas de calor y calma para crecer. Mantenga la temperatura de la leche constante, envolviendo el recipiente con una manta y situándolo cerca de una fuente de calor. Evite sobre todo dejar el recipiente cerca de algo que pueda moverse; es conveniente, si es posible, hacer el yogur por la noche, cuando hay menos posibilidades de que se disturbe. Normalmente, quiere de unas cuatro a ocho horas para tomar consistencia. Una vez que está asentado, métalo en el frigorífico para evitar que las bacte- rias sigan creciendo.
Si no lo hace, las bacterias se comerán los azúcares de la leche y se volverá agrio en dos días. Su yogur se conservará bien du- rante cuatro o cinco días. No se olvide de apartar algo para la preparación del próximo cultivo de yogur. Si el cultivo inicial se va debilitando, sus- titúyalo por un nuevo yogur comprado.
Tiempo de preparación y cocción: 15 minutos Tiempo de reposo: de 4 a 8 horas
El yogur, una de las mejores curaciones naturales Debido a sus curas cualidades y a sus usos, en la preparación de ciertos platos, el yogur ocupa un lugar prominente en la dieta védica. El Ayur-veda habla con detalle de las propiedades curativas del yogur.
Fuera de la India, el yogur es muy popular entre los habitantes de Rusia y de los países balcánicos, famosos por su longevidad. La relación entre una dieta rica en yogur y la longevidad fue rev- elada hace cien años por el gerontólogo ruso Elie Metchnikoff. Su mayor contribución a la ciencia fue su teoría de la propia intoxicación, en la que enunciaba como es posible que los contenidos del colon sean absorbidos por la sangre y envenenen todo el cuerpo.
Metchnikoff examinó y entrevistó a muchos cen- tenarios de Asia y Rusia y notó que sus dietas contenían grandes cantidades de yogur y leche fermentada. Llegó a la conclusión de que su lon-
gevidad era debida a las bacterias de estos productos, que reemplazaban a la bacteria de la putrefacción del intestino. Su teoría desató la primera ola de interés por el yogur como alimento sano. Con el crecimiento del consumo de yogur en Oc- cidente, la ciencia moderna va descubriendo más cualidades extraordinarias.
Algunos ejemplos:
El yogur produce ácido láctico, que destruye la bacteria responsable de la putrefacción de la comida en el intestino grueso, una de las causas principales de muchas dolenciaes y del en- vejecimiento prematuro.
Como es un alimento que ha sido digerido pre- viamente por su bacteria: lactobacillus bulgaris, es fácilmente asimilado por el cuerpo, más rápida- mente que la leche.
El yogur es rico en proteínas, minerales, enzimas y en las vitaminas más conocidas, incluyendo las más difíciles de obtener como la D y la B12.
El yogur aporta a la bacteria intestinal su ali- mento favorito: la lactosa. A menudo los médicos recomiendan a sus pacientes, a los que los anti- bióticos han destruido la bacteria intestinal, que tomen yogur para reproducirla. El yogur tiene an- tibióticos naturales, capaces de eliminar ciertas ami- bas y bacterias, algunas tan virulentas como los estafilococos, los estreptococos y el tifus.
El yogurt produce ácido láctico, el cual destruye la bacteria causante de la putrefacción de los alimen- tos en el intestino grueso, una de las principales causas de dolencia y vejez prematura.
Debido a que es un alimento predigerido por su bacteria lacto bacilius vulgaris, el yogurt es asimi- lado por el cuerpo más rápidamente que la leche.
Es rico en proteinas, minerales, enzima y vita- mina, incluiendo la D y la B12, las cuales son difíciles de obtener.
Remplaza la bacteria destruida por antibióticos.
El yogurt es antibióticos naturales suficientemante fuerte como para eliminar ciertas amebas, hongos y bacterias virulentas tales como la staphilococcus, streptococcus y tifus. El Ayur Veda sugiere que se tome yogurt con al- gún otro alimento, no solo. Tampoco es racomendable consumirlo en exceso ni durante los días muy fríos ni de noche.Se aconseja tomarlo fresco, dentro de las 24 horas de su preparación y evitar el yogurt industrializado que ha sido tratado.
Pregunta y de que tipo de leche se refieren? ?
Manuela Perez Devesa crees que con yogourt y leche de soja saldría igual?
supoño que si A soja e leite vegetal
Superb!
LOS ARTíCULOS los hacen tan largos y sin diagramación de los aspectos más importantes,como un chorizo, que uno se pierde , son poco didácticos.-
P noxyz I
Umm no le tengo mucha fe, yo tengo Kefir y preparo con el mi desayuno con frutas , queso y ahora postres , para mi es mi fuente de bienestar.
Super !
muy buenooooo
Gracias 🙂
Gracias gracias