Cómo vencer el enfado y no dejarnos dominar por el
El fuego entra como ladrón, y en segundos, te roba la suavidad de la piel, te eriza los poros, el rojo te domina; te conviertes en la envidia de un martillo, como diría Neruda, y acabas en una erupción tan castrante como la aparente causa del enfado. Así es la ira, y así destruyes tu relación con el mundo y contigo mismo.
Tal vez el enfado te pica tan claramente como una hormiga roja o tal vez es tan sutil que no te has dado cuenta como te corroe. Sin embargo, te aseguro el enfado ha tocado a tu puerta. Hablar de su inutilidad y su perjurio a tu felicidad es rallar el disco para repetir una cacofonía que ya conoces. Yo quiero compartirte como eliminarlo como se eliminan las malas hierbas: desde la raíz.
Manejar el enfado no es eliminarlo sino lidiar con su manifestación. Por tanto que aunque las técnicas de manejo su beneficio tienen, estas no brindan la calma que buscas ya que a menos que vayan a la raíz, se quedan en la superficie y el círculo defectoso se repite. La filosofía del Sanatan Dharma, sin embargo, propone que la raíz del enfado yace en la existencia de un deseo no agradecido. Si, en los deseos personales no agradecidos. Esta idea puede ser intimidante ya que elimina toda posibilidad de culpar a tu vecino, a tu alma gemela o incluso a tu mascota.
¿Cómo vencerlo?
Si has llegado a ese punto donde has decidido tomar responsabilidad, te invito a que observes estas tres ideas, los cuales son un regalo de la sabiduría de la India:
Comienza por reconocer que la fuente del enfado yace dentro de ti. No culpes a nada o a nadie.
Identifica cuáles son tus deseos, ambiciones o ideas frustradas: aquello que deseas y no se cumple de acuerdo a tus expectativas.
Establece un plan de acción para descubrir tu verdadero Ser o tu atman.
La meditación te ofrece un método
Estas tres ideas encuentran reposo y manifestación cuando logras entenderlas mas allá de tu intelecto. Estas ideas tienen que sobrepasar el nivel intelectual y establecerse como una manifestación natural de la vibración de tu Ser. Para lograr esto no existe mejor método que aquel de descubrir tu propio espíritu a través de la meditación. Una vez logres entrar en ese espacio multidimensional de tu consciencia podrás entender las causas del enfado y eliminarlas por completo. No existe otra forma de vencerlo. El contacto con el Espíritu es lo único que remueve la ignorancia, la raíz del enfado.
Manifiesta tu verdadera naturaleza
La infinitud de tu verdadero Ser es la fuente de la juventud y la fuerza que hará cambiar tu vida y el mundo entero. En tu espíritu encontrarás todos tus deseos agradecidos y lograrás no solo cambiar tu vida sino aquella de todos los que te rodean. Abraza tu verdadera naturaleza y comienza a meditar hoy mismo.
¡om namo bhagavate vasudevaya!