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Colores Feng Shui para la prosperidad de tu hogar

Los colores nos acompañan y sirven como vehículo para expresar nuestras emociones. Vivimos y soñamos en colores, ellos nos relajan o activan y en el Feng Shui, revisten gran importancia para poder lograr un chi equilibrado, que nos permita vivir en armonía con nuestro entorno y nuestra forma de ser.
Adaptar el color de nuestro hogar a los conceptos del Feng Shui, puede ser fuente de increíbles beneficios y bienestar para todos sus habitantes.

Amarillo:
Estamos frente al color del sol, un color que ilumina y crea una atmósfera cálida en todas sus tonalidades. Inspirador de la comunicación, la sociabilidad, la energía mental, la paciencia, la tolerancia y el reconocimiento.
En china era el color reservado al emperador y a sus hijos.
Pertenece al Elemento Tierra y se sitúa en el Noreste, centro y Sudeste. Un color que anima los espacios tanto el trabajo como en el hogar.
Es un buen color para utilizarlo en aquellas habitaciones donde se quiera fomentar el diálogo y la convivencia tales como: el salón, el comedor o la cocina, pero también para la habitación infantil siempre que sea en tono pastel, para no provocar agitación e hiperactividad en el bebé o niño.

Azul:
El color del cielo y del agua, facilita la intuición y la espiritualidad. Un color relacionado con la constancia y la lealtad. Es un color Yin perteneciente al Elemento Agua y debe utilizarse en el sector Norte, donde afianza el trabajo. Muy adecuado en la oficina.
El azul como el violeta forma parte de los colores “zen” que proporcionan calma y reflexión.
Ideal para el cuarto de baño y los pasillos. A evitar totalmente en la cocina y el comedor. En el salón, un poco de azul tendrá efectos relajantes. Es un color que ayuda a la concentración y la meditación bueno para la habitación de un estudiante.
No es un buen color para la habitación de matrimonio, ya que acarrea frialdad en las relaciones de pareja.

Blanco:
El color del equilibrio y la pureza, activa la creatividad, la paz interior y la espiritualidad. Es un color Yin perteneciente al Elemento Metal y debe utilizarse en el Norte y Noroeste de la casa o trabajo, donde el Metal está presente.
Es un color adecuado para la mayoría de las habitaciones, pero hay que evitar un exceso del mismo ya que produciría un efecto de vacío, frialdad, falta de carácter e insatisfacción con uno mismo.
Es un color ideal para el cuarto de baño, el cuarto infantil combinado con otro color, también para una salita donde relajarse o en el despacho. En el recibidor de entrada a la casa, será el canalizador de las energías entrantes y salientes.

Marrón:
Un color nostálgico opuesto al naranja, equivale al estancamiento, la falta de empuje. Es un color Yang, pertenece al Elemento Madera y se utiliza en el Este y Sudeste.
Es un color a evitar en lo posible dentro de la casa, junto con el negro y el gris, sobre todo en paredes si bien los objetos decorativos con este color, pueden mezclarse con paredes amarillas o naranja, para crear una atmósfera armoniosa.

Naranja:
El color más dinámico, un perfecto antidepresivo que activa los sentidos, la creatividad, la alegría y dinamiza los sentidos. Es un color Yin que pertenece al Elemento Fuego y debe utilizarse en el sector Sur. El naranja aporta energía, es un color tónico que genera cambios.
Muy buen color para el recibidor, el salón y la cocina o el comedor, si se busca activar el apetito. Si en la casa hay una habitación para amigos, es también un color perfecto para fomentar la convivencia.