La meditación con el Antahkarana o Antarkarana es una antiquísima forma de potenciar la conexión entre el Yo espiritual y el Yo físico, para liberar el camino hacia nuestro Yo Superior o Yo Supremo, generalmente obstruido por la ilusión de la realidad.
El Antahkarana es un conocido símbolo de la cultura oriental conformado por tres número sietes en una superficie plana, lo que le da apariencia multidimensional y cambiante, de acuerdo a la perspectiva con la que es observado. Los antiguos lo identificaban con el corazón como fuente del alma, la mente y la inteligencia; así como con el triple hilo del alma (vida, conciencia, creatividad) y la trinidad cuerpo, espíritu y mente.
Muchas de las representaciones del Antahkarana reúnen los colores del arcoíris, por lo que es asociado con los colores emanados por los siete chakras principales e incluso con la Teoría de las Inteligencias Múltiples y los tonos de la escala musical.
Neutralizando lo negativo
La meditación a través de la observación o visualización del Antahkarana es considerado un efectivo método de sanación espiritual, que produce cambios en el flujo energético y fomenta la conexión entre los niveles mentales. En el Reiki, el Antahkarana es utilizado como armonizador, protector energético y neutralizador de negatividad, tanto en el aura de las personas como con los objetos; para este último propósito debemos contar con dos imágenes del símbolo y colocar el objeto en medio de ambas.
Algunos estudiosos refieren que existe el Antahkarana Yin (femenino) y el Antahkarana Yang (masculino), siendo diferenciables por el grosor de sus brazos. El símbolo femenino tendría los brazos más delgados que el masculino.
Su uso como un símbolo clave en la sanación y la meditación se remonta a unos cuantos siglos atrás; cuando los maestros tibetanos lo usaban, en secreto, para sus faenas de meditación. Sin embargo, sobre el origen del símbolo no hay una historia definido; a pesar de que uso es frecuente en varias culturas, ninguna se declara creadora del mismo.
El Antahkarana se utiliza en terapias de sanación para lograr un flujo de energía continuo y acelerar los procesos de retorno del cuerpo a su equilibrio natural. Cuando los conocedores del taoísmo o los maestro de reiki los utilizan, lo hacen colocándolo cerca del cuerpo; una vez allí el Antahkarana hace que la energía que normalmente recibimos desde la corona entre por lo pies, suba a la parte posterior, llegue a la cabeza y se repita el ciclo nuevamente.
¿Cómo usar el Antahkarana?
Existen muchas formas de usar el Antahkarana. La más extendida es la meditación, bien sea visualizando su forma en nuestros pensamientos, observando la imagen del símbolo o alternando entre ambos métodos (observación y visualización).
En los procesos de sanación
Se coloca bajo la camilla. También pueden prepararse siete imágenes del Antahkarana, cada uno con uno de los colores de los siete chakras principales, y emplearlos en procesos de armonización.
Para la protección de espacios
Podemos imprimir la imagen y mantenerla en el hogar u oficina, puede ser de forma visible u oculta. De la misma manera, podemos colocar el símbolo en nuestro automóvil o incluso en la billetera, para manifestar nuestra intención de armonizarnos con el principio de la prosperidad.
Tomando en cuenta el poder de sanación del Antahkarana existen muchas formas de aprovecharlo en la vida diaria. A pesar de su uso se asocia a la práctica del reiki y las declaraciones que solo quienes tienen algún nivel de conocimiento pueden hacer, los conocedores de su simbología afirman que es un símbolo que se nos entrega libremente a todos y cada cual puede buscar la mejor forma de beneficiarse de él.