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Aceite de Lavanda Artesano

LAVANDULA OFFICINALIS: EL ACEITE ESENCIAL PARA LOS 3 DOSHAS
Para el Ayurveda, todo lo que entra por los 5 sentidos de la percepción es alimento, por lo tanto la aromaterapia y el masaje son dos herramientas de nutrición importantes para lograr el equilibrio natural.

El aroma fresco, delicado y floral de la lavanda nos alimenta a través del olfato, desplegando su poder armonizador sobre el sistema nervioso: aliviando el estrés, calmando la mente, y favoreciendo una actitud positiva. Este aceite aplicado sobre la piel junto con el masaje sensibiliza el sentido del tacto e intensifica el proceso de purificación: aliviando y expulsando los doshas alterados, aflojando las toxinas acumuladas, incrementando el agni (capacidad digestiva) y fortaleciendo el sistema inmunológico (el Ojas). Al mismo tiempo que nutre la piel, se absorbe y pasa al torrente sanguíneo circulando por el cuerpo y trayendo beneficios a los distintos sistemas (digestivo, circulatorio, muscular, linfático y urinario), además es ideal tanto para pieles secas (tipo Vata) como oleosas (tipo Pitta).

El aceite esencial de Lavanda, se consigue destilando la Lavandula officinalis, un arbusto procedente de los países mediterráneos de Europa y África, con ramas espigadas y flores de color lila de olor muy agradable y preciado. Debe su nombre, a los romanos que lo utilizaban en sus baños (en latín “lavare”) y sus los masajes.

Esta planta es considerada la más importante de los aceites esenciales por sus múltiples propiedades, beneficios, aplicaciones y versatilidad, por lo tanto es el único aceite esencial que no debe faltar en casa y que junto con la manzanilla y el árbol de te puede ser aplicado directamente en la piel.

7 Propiedades del aceite esencial de Lavanda:

Antiséptica: Puede servirnos perfectamente para tratar infecciones de la piel, pero también para problemas de otra índole relacionados con virus y bacterias.

Sedante: Desde las civilizaciones más antiguas este aceite es considerado como un aliado en el alivio del estrés y el insomnio.

Analgésica: Tiene la capacidad de reducir el dolor y la inflamación, especialmente cuando se trata de afecciones de piel y mucosas, así como de quemaduras y contusiones.

Antiespasmódica: Su poderoso efecto antiespasmódico resulta particularmente útil en caso de infecciones leves de garganta y bronquios.

Antiinflamatoria: Reduce y alivia cualquier signo inflamatorio provocado por infección, contusión o congestión sanguínea.

Regeneradora: Ayudará a mantener la piel lozana y a regenerar cualquier zona que haya sido afectada por eczemas, dermatitis, quemaduras, acné, varicela, manchas o envejecimiento prematuro.

Potenciadora: Potencia los efectos y propiedades de todos los aceites esenciales, por lo que conviene añadir unas gotas de este aceite a cualquier otro procesado que estemos utilizando.

Un aceite esencial es el alma de la planta que a través del sentido del olfato y el tacto, es capaz de transportar la energía vital (prana) a todo el organismo y posibilitar la sanación. Para el Ayurveda es un procesado sutil indicado para los 3 doshas: Produce sedación en los doshas Pitta y Kapha y equilibra a Vata.

Hoy en día existen muchos estudios de investigación que han analizado el poder de sanación de los aceites esenciales, dándoles credibilidad y validez científica. Además son usados normalmente en las industrias de cosméticos, perfumerías, alimentos y remedios.

“El amor se brinda a sí mismo tal como una flor da su perfume” Jiddu Krishnamurti

Como hacer aceite esencial de lavanda: [ aquí ]